Hoy en día cualquier marca comercial puede ofrecer semillas de forma fiable; Pero aun así, corremos un gran riesgo al plantar desde semillas. Una semilla puede, en todos los aspectos, estar bien y sin embargo no tener dentro de ella vitalidad suficiente, o poder, para producir una planta resistente y hermosa. Sepa con algunos breves consejos como realizar la selección de las semillas.
Si usted selecciona semillas de sus propias plantas puede elegir con cuidado cuales serán capaces de convertirse en buenas plantas. Suponga que está seleccionando semillas de plantas de la variedad Aster. ¿De qué flores seleccionará las semillas? Ahora, no es sólo la flor que debe considerar si es apropiada o no, sino toda la planta. ¿Por qué? Porque una planta débil y desordenada puede producir una flor fea. Mirando esa flor tan hermosa, piensas en las innumerables plantas igualmente hermosas que vas a tener de las semillas. Pero lo más probable es que las semillas no produzcan plantas como la planta madre. Para la plantación de rosales, no es recomendable realizarla por semillas, ya que las semillas degeneran por generación, es decir la planta resultante será de peor calidad que la planta madre.
Existen plantas cuya reproducción es mas recomendable por esquejes que por semillas.
Así que al estar seleccionando semillas debemos considerar la calidad de la planta entera. ¿Es robusta, fuerte, bien formada y simétrica? ¿Tiene un buen número de flores? Estas son preguntas que debe hacerse en la selección de semillas.
Si por casualidad tiene la oportunidad de visitar un jardín puede encontrar aquí y allá una flor con una cuerda de color atada a su alrededor. Estas son las flores elegidas para recolectar su semilla. Si mira la planta entera con cuidado podrá ver los puntos que el jardinero ha tenido en consideración cuando hizo el trabajo de la selección.
En la selección de semillas el tamaño es otro punto a tener en cuenta. Al principio querrá recolectar el mayor número posible de semillas, pero es más que recomendable descartar las más pequeñas y decantarnos por las semillas más grandes y completas. Dentro de la semilla existe alimento almacenado para que en contacto con los nutrientes de la tierra y el agua pueda germinar, así, si elegimos una semilla grande, hemos elegido una mayor cantidad de alimento para la plántula. Esta pequeña plántula se alimenta de este alimento almacenado hasta que sus raíces están preparadas para hacer su trabajo. Así que si la semilla es pequeña y delgada, el primer suministro de alimentos será insuficiente y existe la posibilidad de perder la pequeña planta.
Si desea saber el nombre de este almacén de nutrientes, no se preocupe se lo diremos, esta primera hoja junto con la despensa de alimentos se llama cotiledón, no se trata de una hoja real de la planta, sino más bien de una falsa hoja; Algunas plantas como los pinos tienen varios cotiledones. Pero la mayoría de las plantas tienen uno o dos cotiledones.
De las semillas grandes vienen las plántulas más fuertes. Esa es la razón por la cual es mejor y más seguro elegirlas.
A menudo nos encontramos con otro problema en las semillas que compramos: la impureza. Las semillas a veces se mezclan con otras semillas, por lo que en apariencia es imposible detectarlas. Las semillas pueden estar sucias, es decir contener impurezas, si las semillas pequeñas son impuras, es muy difícil, y casi imposible, reconocerlas.
La tercera cosa a tener en cuenta en la semilla es la viabilidad. Sabemos por la experiencia que las semillas pueden no desarrollarse en absoluto. Hay varias razones. Las semillas pueden haber sido recogidas antes de que estuvieran maduras, pueden haber estado congeladas o pueden ser demasiado viejas. Las semillas conservan su viabilidad o potencia de desarrollo de germen, un número dado de años y luego son inútiles. Hay un límite de viabilidad en años que difiere para diferentes semillas que dependerá de cada planta.
A partir de pruebas descubrimos el porcentaje de germinación de las semillas. Ahora bien, si este porcentaje es bajo, no pierda el tiempo plantando esas semillas a menos que sean semillas pequeñas ¿Por qué el tamaño de la semilla marca la diferencia? Esta es la razón. Cuando la semilla pequeña se siembra, generalmente la mayoría de aficionados rocían la tierra con las semillas. Así se siembra una gran cantidad de semillas. Y una cantidad suficiente germinan. Así que la cantidad compensa la calidad.
Pero tome el caso de semillas grandes, que deben ser plantadas separadas unas de otras en este método de plantación la germinación es lo más importante.
Por último si decide guardar las semillas para una próxima plantación, hágalo en un lugar seco y frio, resguardado de la luz, una buena opción es el papel de aluminio, aunque también pueden usarse sobres de papel o pequeños botes.