La jardinería japonesa es una forma cultural de la jardinería que está destinada a producir una escena que imita a la naturaleza tanto como sea posible, mediante el uso de árboles, arbustos, especialmente rocas, arena, colinas artificiales, estanques y corrientes de agua. Es una forma de arte basada en las tradiciones Zen y Shinto. Debido a esto; los jardines tienen un estado contemplativo y reflexivo para la mente. La jardinería japonesa es muy diferente que el estilo occidental y la mayoría diría que es mucho más que la meditación y el alma calmante. El jardín japonés tiene un papel importante en torno al hogar.
En la jardinería japonesa hay tres métodos básicos para el paisaje. El primero de éstos se reduce escala, es decir, es el arte de tomar una escena real de la naturaleza, las montañas, los ríos, los árboles, y todo, y reproducirla en una escala más pequeña. La simbolización implica la generalización y la abstracción. Un ejemplo de esto sería el uso de arena blanca para sugerir el océano. Los artistas que utilizarían algo así como un océano de un bosque como fondo, pero terminarían convirtiéndose en una parte importante de la escena.
Hay esencialmente dos tipos de jardinería japonesa: tsukiyami, que es un jardín de colinas y principalmente compuesto por colinas y estanques. El otro es el llamado hiraniwa, que es básicamente el opuesto exacto de tsukiyami: un jardín plano sin ningún tipo de colinas o estanques.
Los elementos básicos utilizados en la jardinería japonesa incluyen rocas, grava, agua, musgo, piedras, cercas y setos. Las rocas son los más utilizados como centros de mesa para atraer la presencia de la espiritualidad al jardín. De acuerdo con la tradición sintoísta las rocas encarnan los espíritus de la naturaleza. La grava se utiliza como un tipo de superficie que define e imita el flujo de agua cuando se disponen adecuadamente. Las piedras se utilizan para crear un límite y están esculpidas en forma de faroles. El agua, ya sea en forma de un estanque, arroyo o cascada, es una parte esencial de un jardín japonés. Puede ser en la forma real de agua o interpretado por la grava, pero no importa lo que el agua está en forma, es crucial un equilibrio en todos los jardines japoneses.
Hay varias formas y tipos de plantas que son la firma de la jardinería japonesa, la principal de las cuales Bonsai como el pino, ciprés, acebo, cedro, cerezo, arce y de la haya, para parecerse a grandes árboles viejos, simplemente en forma de miniatura. Estos árboles se extienden de cinco centímetros hasta un metro y se mantienen gracias a pequeñas podas, macetas, pinzamientos y el cableado de las ramas.
La jardinería japonesa es una tradición que ha cruzado el océano. Muso Soseki, poeta, dijo que “los jardines son una raíz de la transformación”. Un jardín japonés es algo seguro para llevar a cabo muchos sentimientos diferentes y es sin duda una experiencia transformadora.